El papa Francisco expresó este sábado su tristeza “por la pérdida de vidas y la destrucción generalizada causada por los incendios cerca de Los Ángeles”, en Estados Unidos.
Francisco también asegura su cercanía a las comunidades afectadas por esta tragedia y “reza por los esfuerzos del personal de rescate de los servicios de emergencia”, en un telegrama enviado en nombre del pontífice por el secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin, al arzobispo de Los Ángeles, José Gómez.
Los incendios de estos días en Los Ángeles hasta el momento han dejado un saldo de 11 víctimas mortales, una cifra que se teme pueda aumentar una vez que los equipos de rescate puedan comenzar a buscar entre los escombros, mientras más de 150.000 personas continúan bajo orden de evacuación.
El nivel de destrucción que ha alcanzado la ciudad de las estrellas sobrepasa las 12.000 estructuras y el último reporte de AccuWeather aumentó la estimación de los daños totales y las pérdidas económicas entre 135.000 y 150.000 millones de dólares.
En los últimos días, al menos cinco incendios de gran magnitud se han registrado en la región de Los Ángeles, dejando al menos once personas fallecidas, de acuerdo con datos preliminares difundidos por las autoridades locales.
Uno de los siniestros más destructivos, el Palisades Fire, ha consumido más de 8 mil hectáreas (20 mil acres) en Pacific Palisades, destruyendo miles de estructuras. Por su parte, el Eaton Fire ha arrasado más de 5.260 hectáreas (13.000 acres) en Altadena. Las autoridades han ordenado la evacuación de más de 150 mil personas mientras los bomberos trabajan día y noche para intentar controlar las llamas.
Los incendios forestales que afectan al sur de California han sido catalogados como algunos de los más graves en la historia reciente de la región. El Palisades Fire, que arde en la zona residencial y natural de Pacific Palisades, ha destruido miles de viviendas, dejando a numerosas familias sin hogar. Este incendio es el mayor de los cinco activos en la región y ha llevado a las autoridades a implementar evacuaciones masivas.
Mientras tanto, el Eaton Fire ha devastado amplias áreas de Altadena, una comunidad situada en el condado de Los Ángeles. Las llamas han destruido propiedades, interrumpido los servicios básicos y representado un riesgo constante para los residentes. Según información de ABC7, las condiciones extremas, como temperaturas elevadas, fuertes vientos y vegetación seca, han dificultado los esfuerzos para controlar los incendios.
Fuente: Infobae