Miércoles 15.01.2025

La grave crisis en Venezuela

La fe también sostiene la valiente lucha de María Corina Machado

En su reaparición pública esta semana exigiendo la entrega del poder al legítimo ganador de las elecciones fue bendecida por un sacerdote y una monja. Como siempre, cruces y rosarios colgaban de su cuello. La Iglesia pidió respetar la voluntad popular.
Comparte

En Venezuela, el factor religioso no está ausente en medio de las protestas por el fraude cometido por el régimen de Nicolás Maduro. Como ocurrió con María Corina Machado, auténtica referente de la oposición y que permaneció últimamente oculta por la amenaza de ser encarcelada, cuando el jueves reapareció Caracas en una concentración en la que exigió la entrega del poder al electo presidente Edmundo González Urrutia.

Y que tras emerger entre la multitud y ofrecer un apasionado discurso (en el que recalcó que “toda esta fuerza que hemos construido y que crece cada día nos prepara para terminar esta fase final”), fue detenida por fuerzas parapoliciales, aunque a las pocas horas fue liberada.

Con todo, fue muy impactante el momento en el que, subida en una camioneta, fue bendecida en lo alto por un religioso con atuendo franciscano. Una imagen que se repitió al poco, cuando hizo lo propio una monja.

Eso y el hecho de que, como siempre, Machado luce evidentes crucifijos y rosarios en su cuello, revistieron el acto de una fuerte simbología cristiana. De hecho, muchos de los presentes llevaron cruces y rezaron con velas encendidas.

La propia Conferencia Episcopal Venezolana no se quedó al margen en esas horas decisivas y difundió un comunicado firmado entre otros por su presidente, Jesús González de Zárate Salas, arzobispo de Valencia, en el que se reclamó, una vez más, que el régimen debe aceptar lo que el pueblo votó masivamente el pasado 28 de julio: “Esta decisión debe ser respetada”.

El mensaje de los obispos concluyó con un llamamiento a superar los “intereses partidistas”, apelando a un “bien común” que nunca debe perder de vista la “esperanza”.

Fuente: VN y VR