El pastor cristiano evangélico José María Silvestri, de 73 años, murió en el Sanatorio Parque, de la ciudad santafesina, donde fue internado hace algunas semanas tras contagiarse coronavirus.
Silvestri fue fundador de la Iglesia Evangélica Misionera Argentina (IEMA) y de Canal Luz, junto con su esposa Mabel.
Por muchos años fue parte del Ejército de Salvación en la ciudad santafesina, hasta que tuvo el llamado de formar un nuevo grupo que rápidamente creció. Pasó de la sala de su casa al actual templo ubicado en el Boulevar Oroño al 2600. Comenzó con unos micros de radio denominados “Vi la luz”. Reflexiones de pocos minutos con inspiración bíblica.
El crecimiento de la congregación fue exponencial. La dedicación a cada grupo casero, donde familias enteras comenzaron a conocer de Jesucristo fue un impacto en la ciudad, por allá en los años 80. Se destacaba la obra con la juventud, donde de golpe llegaban “melenudos” saliendo de la drogadicción y formando parte de muchos de los que más tarde se convirtieron en líderes.
La obra social se extendió y el evangelio de Jesús era el principal motivo. Se dio el programa televisión en canal 5 de Rosario, también llamado “Vi la luz”. Más tarde la posibilidad de transmitir en radio en una señal propia y lo mismo con un canal de televisión que para finales de los 90 y comienzo del nuevo siglo ya contaba con reconocimiento internacional.
La labor pastoral de Silvestri no se circunscribió a los medios, también lo hizo en el ámbito educativo y sanitario, obra que se extendió en el país.
Incansable soldado de la fe, miembro del consejo pastoral de Rosario. También fue miembro del Consejo Directivo Nacional de ACIERA (Alianza Cristiana Evangélica de la República Argentina).
“En lo personal, el pastor Silvestri siempre portaba una gran sonrisa. Cálido al hablar, como un padre para sus hijos. Siempre con la palabra justa y oportuna. Junto a Mabel tuvieron cuatro hijos: Claudia, Pablo, Patricia y Nancy. Y de ellos nietos y bisnietos, corona de la gracia de Dios para sus vidas”, destacó el pastor Rubén Proietti, presidente de ACIERA.
“Nos informaron que una de sus últimas recomendaciones, fue: ‘Dios consuele y traiga pensamientos que le agraden en medio del duelo’”, reveló el referente evangélico, y agregó: “Un hombre que sabía su destino y que sin duda, hoy fue recibido en la Gloria de Dios”.
“Oramos por su familia, esposa, hijos, nietos y bisnietos. Por los miembros de la IEMA. Por las tías, los sobrinos, primos y demás familiares que son muchos. Rogamos que el Señor consuele los corazones, que traiga paz y confianza de saber que ya no tiene más dolor. De igual manera, damos gracias a Dios por su vida, por su entrega y por haberlo conocido”, concluyó Proietti.
En noviembre de 2013, Silvestri fue nombrado ciudadano religioso distinguido de la ciudad de Rosario y, en agosto de 2019, el Concejo Deliberante de Villa Gobernador Gálvez, reconoció de interés comunitario la labor social sostenida a lo largo de 35 años por la iglesia por él fundada.
Fuente: ACIERA y agencias